¿Dónde hay buscar la mejor Guía para anestesiar a los niños? ¿Quién es capaz de conseguir ponerte realmente en su lugar? ¿Cómo saber lo que piensan cuando van a ser operados? ¿Qué es lo que pasa por sus cabecitas? ¿Hacemos más caso al miedo de los padres que al terror de los niños?
No hay nada mejor que preguntárselo. Y después, escucharlos. Y, siempre, tratar de entenderlos.
Para mi Tesis Doctoral sobre el Tratamiento del Dolor Postoperatorio en Niños, le pedí a mis pequeños pacientes que me hicieran un dibujo sobre su intervención.
¿Qué opinión tienen de sí mismo y del cirujano?
Luis se dibuja escondido. La anestesia le cubre. Le tapa. Le protege. El cirujano es un ser gigantesco, que se acerca a él amenazante. Luis se dibuja expuesto. Y, sin embargo, no está. Ha conseguido huir del peligro.
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